Si habéis reconocido la alta misión espiritual de Jesús, entonces también os resulta comprensible por qué el divino redentor debe ser mencionado continuamente, porque solo cuando el hombre está libre de su culpa original, puede ascender a las alturas claras. La gente no sabe de esta culpa original, y por eso tampoco saben lo que significa la Obra de Redención …. No pueden encontrar ninguna conexión entre la muerte en la cruz del hombre Jesús, en Quien quizás pueden creer todavía, y la Salvación de los hombres ….

Y es por eso que muchos Le rechazan porque esta Obra de Redención solo les fue anunciada, pero no justificada conforme a la verdad. Y nuevamente, tal justificación solo se puede dar a aquellos que realmente desean una aclaración, y siempre habrá solo unos pocos. Porque incluso las explicaciones más claras serán incomprensibles para las personas que no miran hacia el reino espiritual, que solo conocen el mundo terrenal y todo lo que es visible y verificable para ellas.

La misión del hombre Jesús no era solo un asunto terrenal, aunque era visible para los hombres …. Tenía un fundamento espiritual profundo, y mientras que los hombres no lo sepan, tampoco se enfrentarán al divino Salvador como hermanos cargados de culpabilidad que lo cargan con su culpa, que Le piden redención. Y, sin embargo, esta petición debe ponerse primero si quieren encontrar la redención, y por lo tanto deben saber acerca de su culpabilidad de pecado, acerca de la gran ofensa contra Dios, que los hizo pecar y que no pudo ser redimido más que a través de esa gran expiación del hombre Jesús.

Así que mientras la gente no se sienta pecaminosa, no van el camino a Él, a la cruz con su culpa. Y mientras tanto tampoco reconozcan al divino redentor Jesucristo. Solo el conocimiento de su origen, de su naturaleza anterior y de su resistencia a Dios les da una comprensión del acto de Redención de Jesús, Quien vivió como hombre de tal manera que pudo acoger a Dios en Sí Mismo y ahora la Obra de Redención fue realizada por el Amor eterno Mismo que quería liberar a Sus criaturas de las cadenas de Su oponente.

Tal representación de la misión de Jesús será más creíble para los hombres que si solo hablara de los pecados, que ellos cometen en la vida terrenal y que a menudo parecen demasiado pequeños para los hombres como para que un acto de redención haya sido necesario para saldar estos pecados. Es cierto que todo pecado es una ofensa contra el amor, y por lo tanto una ofensa contra Dios …. Pero el pecado original de la apostasía anterior de Dios fue tan grande que el ser mismo no podría expiarlo, incluso si eternidades hubieran pasados. Comprender esto no es posible para vosotros los humanos ….

Pero un pecado tan tremendo también exigía una tremenda expiación, que probablemente un “hombre” haya hecho, pero que solo pudo hacerlo porque este hombre escondió a Dios en Sí mismo, es decir, que la fuerza de Dios Le permitió hacerlo, que era solo “amor”, la sustancia original de Dios …. Los hombres, como seres creados originalmente, habían rechazado esta fuerza de amor de Dios y, por lo tanto, estaban sin ninguna fuerza …. Pero el hombre Jesús hizo uso consciente de la fuerza de amor de Dios y la usó para una Obra de Misericordia para Sus hermanos caídos …. para expiar la culpa de ellos.

Porque los hombres tampoco saben que su existencia como seres humanos en la tierra es la consecuencia de esta culpa original y probablemente volverán a alcanzar su estado original una vez, pero nunca sin el reconocimiento de Aquel, Quien la ha borrado por gran amor. Porque su apostasía de Dios era un “apartarse de Él” consciente, lo que requiere un “volverse hacia Él” consciente, para poder volver a entrar en la relación original con Dios.

Si a los hombres se los da este conocimiento al respecto, entonces es una gracia inaudita que cada uno debería evaluar en la medida que se ocupa realmente con esto, que debería aceptar como verdad lo que se le transmite. Porque entonces solo necesita dirigirse al “hombre Jesús” y hablar mentalmente con Él …. y Él le responderá como “Dios”, lo ayudará a llegar al conocimiento correcto de su culpa, y se lo quitará, si lo confiesa y Le pide ayuda ….

Y cada hombre puede alcanzar el reconocimiento de que tiene que haber hecho algo mal una vez, tan pronto como sólo piensa en ello, que es un ser imperfecto, débil e ignorante y trata de sondear la causa de ello. Porque ninguna pregunta interna de tal tipo se queda sin respuesta, solo que la pregunta tiene que hacerse primero, lo que la mayoría de las personas no hacen, pero rechazan sin escrúpulos cualquier referencia al divino Redentor cuando se les llama la atención hacia Él y Su gran misión espiritual.

Pero por parte de Dios, el divino Redentor Jesucristo será proclamado a los hombres una y otra vez y todos Sus siervos que actúan por Él en la tierra predicarán Su nombre y Su Evangelio con celo cada vez mayor, para que todos sean libres de su gran culpabilidad, para que quienes que lo escuchan entren en contacto íntimo con Jesucristo, en Quien Dios Mismo se hizo hombre, para redimir, lo que está atado por Su adversario ….

Amén